Saladino sufrió fiebre tifoidea

Saladino nacido en 1137 se convirtió en el sultán de una enorme área que ahora incluye Egipto, Siria, partes de Irak, Líbano, Yemen y otras regiones del norte de África, que dirigió con éxito ejércitos contra los cruzados invasores y conquistó varios reinos. Los historiadores lo han descrito como el kurdo más famoso de todos los tiempos.

Su muerte Saladino sigue siendo un misterio. Sufrió una enfermedad en 1193, cuando tenía 56 años y después de dos semanas, murió. Se ha especulado que la fiebre era un síntoma prominente de la enfermedad. Ahora, después de examinar detenidamente una serie de pruebas sobre la enfermedad de Saladino, Stephen J. Gluckman, profesor de Medicina de la Facultad de Medicina de la Universidad estadounidense de Pensilvania, plantea la teoría de que sufrió fiebre tifoidea, una enfermedad bacteriana que era muy común en la región en ese momento. Hoy, por supuesto, los antibióticos podrían haber ayudado mucho a Saladino, pero en el siglo XII estos medicamentos no existían.

El doctor Gluckman explicó su teoría en el transcurso de la 25ª Conferencia Histórica Clínicopatológica anual, que se celebra en la Facultad de Medicina de la Universidad de Maryland. La conferencia está dedicada al diagnóstico de trastornos que afectan a figuras históricas; en el pasado, los expertos se han centrado en las patologías de celebridades como Lenin, Darwin, Eleanor Roosevelt y Lincoln.

El doctor Gluckman, un experto en trastornos parasitarios, que ha brindado atención y ha enseñado en muchos países alrededor del mundo, revisó cuidadosamente lo que se sabe sobre la historia médica del sultán. «Practicar la medicina a lo largo de los siglos requería una gran cantidad de pensamiento e imaginación –dice–. La cuestión de lo que le sucedió a Saladino es un rompecabezas fascinante».

Saladino, entre otras hazañas, destruyó el ejército del Rey Guy en los Cuernos de Hattin en 1187 y reclamó Jerusalén para el Islam después de que los cruzados cristianos lo habían gobernado durante casi un siglo. También es famoso por tratar a sus enemigos generosamente.

La fiebre tifoidea es una enfermedad potencialmente mortal que se transmite por alimentos y agua contaminados. Los síntomas incluyen fiebre alta, debilidad, dolor de estómago, dolor de cabeza y pérdida del apetito. Es común en la mayor parte del mundo, excepto en regiones industrializadas como Estados Unidos, Europa occidental, Australia y Japón. Aproximadamente, 300 personas sufren fiebre tifoidea en Estados Unidos cada año, y la mayoría de ellas han viajado recientemente. A nivel mundial, la fiebre tifoidea infecta a unos 22 millones de personas al año y mata a 200.000.