Prevenir la ceguera en diabA�ticos

Junio 2015.- Investigadores de las Universidades estadounidenses Johns Hopkins y Maryland, han llevado a cabo un estudio con cA�lulas humanas cultivadas en el laboratorio, en la que han descubierto que, al bloquear dos proteA�nas de crecimiento de los vasos sanguA�neos, podrA�an ofrecer una nueva forma de tratar y prevenir la retinopatA�a diabA�tica. Esta enfermedad es la causa mA?s comA?n de pA�rdida de visiA?n en los adultos en edad de trabajar en Estados Unidos, y se produce cuando los vasos sanguA�neos normales en el ojo son reemplazados con el tiempo, con vasos sanguA�neos anormales permeables y frA?giles que que dejan escapar fluido o sangran en el ojo, daA�ando la retina sensible a la luz y provocando ceguera. Actualmente, entre el 40 y el 45 por ciento de los estadounidenses con diabetes sufre retinopatA�a diabA�tica, segA?n el Instituto Nacional del Ojo.

El sellado con lA?ser de los vasos sanguA�neos del ojo puede salvar la visiA?n central, pero a menudo sacrifica la visiA?n perifA�rica y nocturna, segA?n el profesor asistente de OftalmologA�a en la Escuela de Medicina de la Universidad Johns Hopkins Akrit Sodhi, uno de los autores de este estudio, cuyos detalles se relevan en un artA�culo publicado en a�?Proceedingsa�?, A?rgano oficial de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos.

Varios fA?rmacos recientemente desarrollados — bevacizumab, ranibizumab y aflibercept– pueden ayudar a tratar estos vasos sanguA�neos mediante el bloqueo de la acciA?n de VEGF, el llamado factor de crecimiento liberado como parte de una cadena de seA�ales en respuesta a niveles bajos de oxA�geno, lo que a menudo estimula el crecimiento de nuevos vasos sanguA�neos anormales. Pero los estudios han demostrado que, aunque estos fA?rmacos ralentizan la progresiA?n de la retinopatA�a diabA�tica proliferativa, no la previenen.

Savalan Babapoor-Farrokhran, y Kathleen Jee analizaron los niveles de VEGF en muestras de lA�quido del ojo tomado de personas sanas, individuos con diabetes que no padecA�an retinopatA�a diabA�tica y enfermos con retinopatA�a diabA�tica de diversa gravedad.

Aunque los niveles de VEGF tendA�an a ser mayores en aquellos con retinopatA�a diabA�tica proliferativa, algunos tenA�an menos VEGF que en los participantes sanos. Pero incluso el fluido con bajo nivel de VEGF de pacientes con retinopatA�a diabA�tica proliferativa estimulA? el crecimiento de los vasos sanguA�neos en las cA�lulas cultivadas en laboratorio. «Los resultados sugieren que aunque VEFG desempeA�a claramente un papel importante en el crecimiento de los vasos sanguA�neos, no es el A?nico factor», aA�ade Sodhi.

Una serie de experimentos en cA�lulas humanas y ratones de laboratorio revelA? un segundo culpable, una proteA�na llamada angiopoyetina 4. Cuando los investigadores bloquearon la acciA?n de VEGF y angiopoyetina-4 en el lA�quido de los ojos de las personas con retinopatA�a diabA�tica proliferativa, redujeron notablemente el crecimiento de los vasos sanguA�neos en las cA�lulas cultivadas en laboratorio.

Si se lograra encontrar un medicamento que bloquea de forma segura la acciA?n de la segunda proteA�na en los ojos de los pacientes, puede combinarse con los fA?rmacos anti-VEGF para prevenir muchos casos de retinopatA�a diabA�tica proliferativa, sugiere Sodhi. El equipo estA? ahora investigando si la angiopoyetina- 4 tambiA�n podrA�a desempeA�ar un papel en otras enfermedades oculares, como la degeneraciA?n macular, que destruye la parte central de la retina.